Estaba escribiendo aquí la invitación a la charla de 21 de junio y de repente encontré una descripción adecuada para la palabra adecuada.





En la vida cotidiana el ser humano se encuentra en el poder de las circunstancias y no es capaz de influir de manera alguna a su marcha. La vida “sucede” como si fuera un sueño. Las circunstancias van a su bola sin tener en cuenta todas las “quiero” y “no quiero” del hombre.
Al parecer, es imposible evitar  esa fatal inminencia. Sin embargo, existe un remedio para salir de esa situación. Un remedio totalmente inesperado y sorprendente.   Se trata de cambiar nuestra forma de pensar que más nos caracteriza como esclavos (de las circunstancias, del "destino", de los castigos, de las culpas y etc.) a ser seres libres, Creadores de nuestra vida, creadores de las circunstancias favorables y oportunidades.
¿Cuál es la forma para dominar las circunstancias, para tomar las riendas de tu vida en tus manos? ¿Cómo dejar de ser el pasajero en el barco que está a merced de las olas y convertirse en el dueño de este barco y no ir a donde te lleven, sino dirigirlo hacia donde tú quieras?